De viaje con Onada: la India según "Mango con pimienta" de Ángel Martínez Bermejo

Si en la propuesta viajera de la semana pasada recorrimos Europa acompañando a Andrea Aguilar-Calderón, ahora cambiamos de continente. Nos vamos en Asia, concretamente en la India, y más concretamente, en Kerala, en la punta sudoriental del subcontinente, la parte que mira hacia Europa. Allí nos espera Ángel Martínez Bermejo, un periodista especializado en viajes de contrastada trayectoria y experiencia, autor de "Mango con pimienta. Un viaje en Kerala", IX Premio Internacional de Literatura de Viajes "Ciutat de Benicàssim".

El escritor madrileño enseguida nos ubica. Kerala es un estado muy diferente al resto de la Unión. Ha sido desde siglos una tierra abierta a exploradores (Ibn Battuta, Vasco de Gama) y a las influencias exteriores. Cruce de culturas y religiones, hoy en día es un lugar con una alta alfabetización y una esperanza de vida similar a la europea. Es la vanguardia del progreso del país sin olvidar sus raíces.

Como un buen viajero -diferente a un buen turista-, Martínez Bermejo deja a un lado la guía y se dispone a conocer y presentarnos Kerala adentrándose en su sociedad. Por un camino que transita a solas, se nos aparecen múltiples personajes que nos ayudan a comprender un país, que a pesar de las dificultades, es feliz y optimista. Taxistas, comerciantes de especies, periodistas, vendedores ambulantes... las diversas caras de Kerala nos aproximan a lo que hay detrás del exotismo.

Y el periodista observa y participa: persigue un tigre por la selva y presencia la impresionante festividad del Pooram de Arattupuzha, una imagen que ilustra la cubierta de "Mango con pimienta". La multicultural y portuaria ciudad de Kochi, centro del comercio de especies a lo largo de años y años, o los parajes y aldeas que rodean Thiruvananthapuram, la capital del estado, son otros de los destinos que nos propone el periodista. Todo aderezado con las continuas referencias políticas, históricas, sociales y etnológicas que reparte el autor para la narración, y que, sin duda, nos invitan a desplazarnos a 10.000 kilómetros a través de las páginas del libro. Tal y como apunta Pablo Strubell al digital Leer y Viajar, "lejos de resultar una recopilación de textos inconexos, el hilo conductor del viaje, su propia ruta, el autor teje un relato ameno e interesante en busca de aquellos lugares que explican la historia, la cultura y las religiones que conviven en esta región".

Para saber un poco más de las experiencias de Martínez Bermejo en Kerala, puede escuchar la entrevista que le hicieron en el programa radiofónico SER Aventureros.

De viaje con Onada: Europa según "Sobre el caballito de madera" de Andrea Aguilar-Calderón

Si hablamos de libros para conocer otros lugares, la referencia son las obras ganadoras del Premio Internacional de Literatura de Viajes "Ciutat de Benicàssim", un galardón que durante una década ha reconocido los mejores relatos del género, tanto en valenciano como en castellano. En Onada Edicions hemos editado los tres últimos, "Sobre el caballito de madera" de Andrea Aguilar-Calderón, "Mango con pimienta" de Ángel Martínez Bermejo y la próxima novedad de "La paciència del minotaure" de Ivan Carbonell. En los tres casos estamos ante obras literarias con presunción de realidad, amenas y entretenidas, y que nos descubren vía los protagonistas el placer (y la aventura) de viajar y explorar otras culturas, países y sociedades. Así, una serie dedicada a los libros viajeros de Onada debe empezar por fuerza con los "Ciutat de Benicàssim".

Andrea Aguilar-Calderón es una periodista de Costa Rica. Al bordear la treintena y asqueada por un trabajo insulso, decide hacer la maleta y llevar a cabo un viaje. Pero no es un viaje planificado. Por el contrario, bajo el adjetivo de "dadaísta" califica un periplo por Europa en el que salta de un lugar a otro sin que parezca que haya ningún orden ni concierto, sencillamente para cumplir su lema, tomado del music Charly Garcia: la vida es disfrutar del paso del tiempo.

La protagonista (la autora, al fin y al cabo, hablamos de una historia real) recorre Europa saltando de país en país. Cargada con una mochila casi mayor que la portadora, abre su camino a Madrid, y previo paso por tierras valencianas, marcha por Europa Central: Suiza, Austria y el pequeño Liechtenstein; Hungría y Polonia son los siguientes destinos. Mientras, la viajera dadaísta no sólo nos cuenta qué ve o qué hace, también qué siente o qué recuerdos le despierta una comida o una persona -es un viaje unipersonal, pero no solitario. Todo siempre desde el humor (más o menos agridulce en ocasiones) y explicado en un castellano bien 'tico', es decir, costarricense.

El recorrido prosiguen por los Balcanes: Croacia, Serbia, Bosnia, Kosovo y Macedonia, así como por Rumanía, Bulgaria y Albania, de donde fue expulsada del país para entrar sin visado. Aguilar-Calderón nos muestra, en la línea de los mejores escritores de literatura de viajes, la diferencia entre viajar y hacer turismo. El dadaísmo inspirador toma escenas casi surrealistas en lugares perdidos de la Europa Oriental, cuando el visitante profundiza más en la sociedad que una simple guía de viajes. Todo ello salpimentado con las preocupaciones que la protagonista lleva en la bolsa desde su país y que le acompañan en la vuelta continental.

Con Italia la autora se despide de Europa y retorna de nuevo a Costa Rica. Un largo viaje lleno de vivencias de todo tipo que dieron lugar a "Sobre el caballito de madera", al final, obra ganadora del VIII "Ciutat de Benicàssim". Puedes seguir los relatos viajeros de Andrea Aguilar-Calderón en su página web.